Ángel Hernández presenta dos proyectos en torno a la guerra y la memoria colectiva.
BULLDOZERMérida, Capital Americana de la Cultura 2017 + la Escuela Superior de Artes de Yucatán presentan Bulldozer, un proyecto de intervención basado en el estudio de la destrucción/reconstrucción de las ciudades a partir del impacto de la guerra y las crisis sociales.Se trata de un dispositivo escénico de investigación y tratamiento del espacio urbano en demolición a partir de una plataforma crítica asociada a los períodos de la guerra generacional en la franja de Gaza. Un interrogatorio continuo entre la destrucción/reconstrucción de las sociedades contemporáneas y el salvajismo de una era basada en el placer del exterminio. Las funciones son los días 2 y 3 de junio a las 20:00 horas en el foro de video de la ESAY-TRENES. La entrada es libre.
GEOGRAFÍAS DE LA MEMORIAPor otra parte, el reconocido dramaturgo Ángel Hernández, director del proyecto, ofrece de manera gratuita el laboratorio de creación Geografías de la memoria enfocado a la composición de piezas dramatúrgicas relacionadas con la memoria de los acontecimientos sociales de los últimos años en México, con el fin de crear una cartografía basada en procesos de investigación y creación múltiple a partir de la dramaturgia como horizonte de significación y terreno vivo de acción para la escena contemporánea en México.Tendrá lugar en el foro de video de la ESAY-TRENES el domingo 4 de junio de las 9:00 a las 14:00 hrs. Podrán participar dramaturgos, actores, artistas sonoros, directores de escena, artistas visuales y demás creativos dedicados a las artes escénicas. La entrada es libre. Inscripciones al correo electrónico murmurante.teatro@gmail.com y en Facebook en inbox con Ariadna Medina.
ASALTO TEATROEs un colectivo escénico independiente fundado en Tampico, Tamaulipas en 1997. Su director, Ángel Hernández, es miembro del Sistema Nacional de Creadores de Arte del FONCA y su proyecto de largo aliento Teatro para el Fin del Mundo cobra especial relevancia y actualidad, ya que propone un programa continuo de intervención y ocupación de espacios en ruina marcados por contextos de violencia. Desde la muy violentada geografía urbana tamaulipeca, Teatro para el Fin del Mundo ha extendido su influencia hacia otras latitudes como Vietnam, Camboya, Marruecos, Bosnia y Herzegovina, Japón, la Franja de Gaza, Ucrania, Grecia, Polonia, La India, Afganistán, Kosovo, Turquía y México. La obra dramatúrgica de Ángel Hernández le ha merecido, además, un amplio reconocimiento de la crítica y se ha hecho acreedor a los premios nacionales Tejeda de Tamez y Víctor Hugo Rascón Banda, así como a los premios del jurado y del público del Festival alemán Heidelberg Stuckemart.
Texto + imágenes:Mérida Capital Americana de la Cultura 2017 & ESAY