7.8.18

vanessa rivero_espacios de cautiverio


La obra reciente de Vanessa Rivero cuestiona el impacto del conocimiento en el mundo animal. Límites baldíos, instalación curada por Daniela Pérez, consta de una publicación, dibujo, escultura y video.

Según la lógica desde la que se mire, hemos encontrado justificación para el confinamiento de seres vivos en: el entretenimiento (el caso del circo y el zoológico); la curiosidad, el estudio y el conocimiento (un laboratorio científico); las cuestiones de seguridad, castigo y sanidad (una cárcel, un asilo o un psiquiátrico) o el control y la organización de los recursos naturales (una granja, por ejemplo). En cualquiera de estos y otros casos, la posibilidad de ejercer el poder se encuentra en la base de la fuerza que impulsa la existencia de la mayoría de las estructuras sociales que, literalmente, enjaulan.

Pero entonces, ¿cuál es el orden natural de las cosas?

Daniela Pérez


MUESTRA
Me planteo la muestra como el resultado de una investigación de dibujo. Este lo concibo como idea, experiencia, recorrido y paisaje a explorar. Me interesa que la obra se vaya construyendo, se transforme desde distintas perspectivas, dialogue con los espacios donde se presenta y se enriquezca con las colaboraciones. La exposición consta de 2 sedes [Museo de Historia Natural + Centro Cultural ISSSTE Ex Penitenciaría Juárez]. El libro incluye textos de Marco Díaz Güemez y Daniela Pérez; en la expo hay un video en colaboración con Alejandro J. Castilla y, bajo esta misma lógica, Hernán Berny y Mónica Costa (Escópica) organizaron 2 eventos de proyección y análisis de filmes relacionados con el tema que abordo.

PROCEDENCIA
Límites baldíos [2018] extiende la investigación que comencé hace varios años, la cual ha ido transmutando en cada muestra. El proyecto anterior, El orden, una frágil conquista [2017], que presenté en la Casa del Lago y en el Museo de la Ciudad de Querétaro con Víctor Palacios, fue a su vez una síntesis y una continuación de Orbis Spike [2015-2016], cuyo eje básico fue un ensayo visual sobre la naturaleza, a partir del cual organicé exposiciones, conferencias e intervenciones con distintos agentes culturales—artistas, académicos y activistas—para poder abarcar de manera más significativa el tema. Dicho proyecto se vinculaba con el anterior, Tú eres tu casa, yo soy la mía [Museo de la Ciudad de Mérida, 2014], donde abordaba cuestiones familiares y de juegos de poder, que habían comenzado en Territorio K [FrontGround, 2011]. En cierto modo, los elementos han sido los mismos pero vistos desde otros ángulos: los animales, el paisaje, la casa, los juegos de poder. Siempre desde el dibujo.

LIBRO
En Orbis Spike, decidí ampliar la idea de casa a nuestra casa = la Tierra, y los animales a todos nosotros. Con Límites baldíos, me concentro en los animales no humanos para hacer un poco más evidente, si bien nos olvidamos de ello, que pertenecemos al mismo grupo de seres vivos.

Dividí el libro en dos capítulos; en el capítulo I exploro el espacio, ya que es nuestra principal “lucha” con los animales, lucha desigual e injusta porque ellos no cuentan con las herramientas ni la ambición humana. En el capitulo II están los animales que se van confinando a Zoológicos y Museos de Historia Natural. Es decir, espacios cuya justificación es el conocimiento de otras especies naturales.

El libro, que plantea nuestra mala relación con los animales, incluye dos textos, el de Daniela Pérez—curadora—y el de Marco Díaz, quienes hablan de este tema y también del contexto histórico donde la muestra se ha presentado.

CONNOTACIONES
La reflexión sobre el vínculo establecido con los animales debe hacernos pensar en nuestra humanidad. ¿Cómo nos comportamos con seres supuestamente inferiores a nosotros? ¿En qué nivel se encuentra nuestra empatía con el otro? En nuestra relación con los animales, tenemos ese primer problema. Nos han enseñado desde una creencia judeocristiana que somos superiores y que ellos están para servirnos. Otra pregunta importante que se debería generar es: ¿qué tan diferente resulta nuestra relación con otros humanos que consideramos inferiores? En la mayoría de los grupos animales hay rangos. Según la escala de valores (conocimiento, dinero, destreza) de cada grupo social, se forman jerarquías y relaciones desiguales.











ESPACIOS
La cárcel, el psiquiátrico y el zoológico son tres espacios donde, por muchas razones, a veces injustas e injustificadas, encerramos animales, humanos y no humanos. En Mérida, a partir de 1906, se inauguraron estas instituciones en pos de la modernidad. Ahora nos debemos preguntar: ¿cuáles otras instituciones y prácticas actuales a favor de una supuesta mejor vida, mayor bienestar, mayor comodidad, o más conocimiento, nos están llevando rápidamente a esta catástrofe ambiental? Son tantas que tenemos que preguntarnos e investigar cuáles no. Con la cantidad de dinero que se mueve, es muy difícil saber, pero es necesario asumir la responsabilidad de nuestro propio consumo. En gran parte, es lo que está acabando con todo.

El Parque de la Paz fue un conjunto de equipamiento urbano inaugurado por Porfirio Díaz en 1906, con su renovada cárcel, su nuevo hospital y su magnificente psiquiátrico. Como podemos ver, se pusieron en el mismo lugar todas las instituciones quintaesencialmente modernas que luego Michel Foucault estudió y criticó con novedosos métodos historiográficos y analíticos. Y por si fuera poco, en 1910 se le agregó el jardín botánico Centenario que hacia 1960 fue transformado en zoológico. Este impresionante conjunto urbano funcionó como tal hasta principios de la década de 1980, quedando solo el Centenario con su función original.

Marco Díaz Güemez

TIGRE
El video muestra a un tigre de Bengala en plena psicosis animal, dando vueltas y vueltas, encerrado en un espacio reducido. Hemos llegado a este punto del cambio climático y de la sexta extinción masiva—fenómenos anunciados en las revistas científicas—debido al conocimiento mal utilizado, mal entendido, movido en gran parte por factores económicos y políticos, pero también por tradiciones sin sentido. El Zoológico del Centenario en Mérida, donde se registró este video, es un ejemplo. No hay nada que realmente justifique mantener a los animales encerrados en jaulas inmundas, con un calor espeluznante, más que el gusto de los yucatecos.


INTELIGENCIA
No me interesa ni puedo adoptar una postura moral, pero es urgente cuestionar nuestros hábitos y costumbres. Algo no está funcionando como debería. Con frecuencia olvidamos que somos animales, nos asignamos una jerarquía superior y no somos conscientes del daño que nos provocamos como especie.

Los nuevos estudios científicos empiezan a observar ya la inteligencia de los animales de otra manera, no a través de nuestro cuerpo, nuestras necesidades y nuestra inteligencia, sino desde su inteligencia, su ecosistema, su cuerpo y sus necesidades. Un libro importante al respecto es Are We Smart Enough To Know How Smart Animals Are?, de Frans de Waal.

MODELOS
En mi proceso, selecciono conceptos que me interesan, información relevante. Hay varios autores clave: Bruno Latour, Frans De Waal, Marcus Gabriel, Alexander von Humboldt, las conversaciones que se generaron desde Orbis con todos los invitados, los diálogos con Daniela Pérez y Marco Díaz, seminarios a los que asistí o participé, la prensa, algunas películas, novelas, documentales, entre otros.

Trato de pensar qué somos, cómo funcionamos en sociedad y cómo llegamos a este punto específico. Me parece que las jerarquías existen en casi todas las sociedades animales. Pareciera que tenemos escrito en los genes un conjunto de elementos de los cuales nos es muy difícil escapar. De ahí surgen los símbolos, los animales fantásticos, los aluxes y otras formas de existencia que aparecen dentro de la muestra. Al final, lo que planteo en la exposición es la posibilidad de romper con esos modelos que tanto daño nos causan. Traté de hacer gráfica esa idea, y seguiré tratando.


Límites baldíos se presenta hasta el 10 de Agosto en la Ciudad de Mérida.
Muestra realizada gracias al apoyo del
Fondo Mérida 2017 para la Cultura y el Desarrollo.

Edición de textos I Christian Núñez
Imágenes I Cortesía Vanessa Rivero